El baloncesto le enseñó a Paul Silas a ser paciente
Como jugador, esperó 10 años antes de ganar su primer campeonato. Como entrenador, esperó 15 años una segunda oportunidad de dirigir un equipo. Como padre, esperó 20 años antes de ver a su hijo tener la oportunidad de liderar una franquicia.
“Siempre traté de mantener una actitud positiva”, dijo Silas en 2013, “y creo que por lo general funcionó”.
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Silas, quien tocó el juego como jugador, entrenador y presidente de la Asociación Nacional de Jugadores de Baloncesto, murió, anunció su familia el domingo. Silas, cuyo hijo, Stephen Silas, es entrenador de los Houston Rockets, tenía 79 años.
“Combinó el conocimiento desarrollado durante casi 40 años como jugador y entrenador de la NBA con una comprensión innata de cómo combinar la disciplina con su positividad interminable”, dijo el presidente de los Charlotte Hornets, Michael Jordan. “Dentro o fuera de la cancha, la personalidad entusiasta y atractiva de Paul estuvo acompañada de una anécdota para cada ocasión. Fue una de las mejores personas de todos los tiempos en nuestro juego y lo extrañaremos”.
La hija de Silas, Paula Silas-Guy, le dijo a The New York Times que su padre murió el sábado por la noche de un paro cardíaco. El Boston Globe informó por primera vez sobre la muerte de Silas.
