El quarterback de los Jets salió del juego de su debut en la temporada 2023-24 con una lesión que es fatídica en las aspiraciones de la organización.
El mariscal de campo Aaron Rodgers no tuvo el estreno esperado con su nuevo equipo, los New York Jets, en el primer Monday Night Football de la temporada 2023-24, saliendo lesionado ante la mirada atónita de todos los que esperaban verlo brillar con una camiseta distinta a la de los Green Bay Packers.
Los Jets revelaron que Rodgers sufrió una lesión en el tendón de Aquiles ante los Buffalo Bills, la cual lo deja fuera por el resto de la temporada, según informó el entrenador en jefe Robert Saleh tras los resultados de la resonancia magnética.
«La resonancia magnética probablemente confirmará lo que pensamos… No es bueno», dijo Saleh a Albert Breer, de The MMQB.
Rodgers tuvo que abandonar el partido tras recibir un sack en su primer intento ofensivo como miembro de los Jets.
Fue sacado con la ayuda de los trainers y el cuerpo médico del equipo, que reveló minutos después que los rayos X fueron negativos. Sin embargo, el quarterback no podrá jugar más, siendo un golpe durísimo para la franquicia.
Rodgers reestructuró su contrato con los Jets hace unas semanas, firmando un acuerdo por dos temporadas y 75 millones de dólares garantizados. El cuatro veces ganador del MVP tenía 110 millones de dólares restantes de su acuerdo con los Packers, pero tras el cambio hecho en el mismo, ahora Rodgers recibirá los 58.3 millones de dólares de una opción en 2024, en el que será el último año del pacto.
Los Jets adquirieron en un cambio con los Packers a Rodgers, la selección número 15 y una de quinta ronda del Draft de la NFL de 2023; mientras que Green Bay obtuvo la escogencia número 13, una de segunda ronda de 2023, una de sexta vuelta y una condicional de segunda ronda en 2024 si Rodgers juega el 65% de las jugadas de los neoyorquinos, algo que no ocurrirá.
Fuente: FanSided
