La selección Argentina venció 4-3 a la selección neerlandesa en la tanda de penales. De parte de los sudamericanos, anotaron: Lionel Messi, Leandro Paredes, Gonzalo Montiel y Lautaro Martínez que anotó el penal que terminaría calificando a la selección a la próxima instancia, el único que falló su penal fue Enzo Fernández. Por su parte, Países Bajos se topó con un Emiliano Martínez que se volvió gigante en la portería al igual que en aquella Copa América contra Colombia, el portero atajó los dos primeros penales, los cuales fueron lanzados por Van Dijk y Berghuis. Luego los neerlandeses marcarían tres penales consecutivos, pero no sería suficiente.
En los primeros minutos del partido, el juego fue bastante cauto por ambos equipos y cuidándose uno al otro de cualquier ataque. Países Bajos tuvo más la posesión, pero no pudo encontrar ninguna forma de superar la defensa de los sudamericanos, al minuto 35 Messi se sacaría un pase absolutamente debajo de la manga, digno de genio y le daría la asistencia a Nahuel Molina para ponerse en ventaja e irse con la ventaja al medio tiempo.
La segunda parte sería más de lo mismo, hasta que Acuña entró al área en búsqueda de desbordar y le cometieron una falta dentro del área que sería pitada como penalti. El capitán, Lionel Messi sería el encargado de patearlo y no fallaría, poniendo 2-0 arriba a Argentina, en un resultado que parecía ser suficiente para avanzar a semifinales. Louis Van Gaal haría su último cambio, sacando a Memphis Depay y entrando a Wout Weghorst, este hombre lograría marcar el 2-1 y Argentina comenzaría a ponerse nerviosa faltando siete minutos más el agregado.
Faltando un minuto en el partido, Germán Pezzella cometería una falta innecesaria que le otorgaría una oportunidad más a Países Bajos. Weghorst marcaría el segundo tras una gran jugada a balón parado, siendo asistido por Teun Koopmeiners, llevando el partido a tiempo extra. Siendo francos, Argentina hizo más mérito en el extra tiempo para llevarse el partido teniendo algunas situaciones peligrosas que fueron denegadas por Noppert y otras siendo falladas por sus propios jugadores.
Fue un total partidazo, con todo lo necesario, drama, goles, emociones al rojo vivo, todo. Se rompió un record de tarjetas amarillas con un total de 17 y una tarjeta roja que fue para Denzel Dumfries antes de los penales, uno de los puntos bajos del partido fue el arbitraje de Mateu Lahoz, siendo constantemente encarado por los jugadores y siendo criticado por Lionel Messi y Emiliano Martínez en la rueda post partido.