MINNEAPOLIS – Si los Mellizos quieren alcanzar sus objetivos en el 2025, pocas cosas son más importantes que la salud de Carlos Correa. El puertorriqueño, tres veces llamado al Juego de Estrellas, tuvo una de sus mejores temporadas en el 2024 en términos de rendimiento por turno al bate, pero se perdió la mayor parte de la segunda mitad del año debido a una fascitis plantar en el talón derecho.
Con tres semanas restantes antes del inicio de los entrenamientos primaverales, Correa está satisfecho con cómo se siente.
“Me siento genial,” aseguró Correa el fin de semana durante el Twinsfest. “Estoy listo para todo, completamente listo para los entrenamientos. He estado corriendo a toda velocidad. He estado corriendo por todos lados. Estoy haciendo prácticamente de todo. Me he enfocado no solamente en el tratamiento, sino también en fortalecerme, caminar descalzo mucho por la casa ahora. Todo eso está ayudando a trabajar en mis dedos y en todo eso. Entonces, estoy en una muy buena posición”.
Correa fue elegido al Juego de Estrellas en el 2024, gracias a un extraordinario desempeño en la primera mitad, pero se perdió el partido debido a la lesión. No volvió a jugar hasta el 14 de septiembre, momento en el cual el bajón del equipo hacia el final de la temporada ya estaba en marcha. Su producción ofensiva tras su regreso fue tan eficaz como antes de la lesión, pero no fue suficiente para detener la caída del club.
Sin embargo, tanto él como el club ha expresado un optimismo significativo sobre su pronóstico para el 2025.
“Carlos está en una excelente posición ahora mismo”, comentó el viernes Derek Falvey, presidente del departamento de operaciones de béisbol de los Mellizos. “Nuestro coach de bateo [Matt Borgschulte] acaba de visitarlo y dijo que físicamente ya está en forma de mitad de campaña.”
Fue el segundo año consecutivo en el que Correa tuvo que lidiar con esta dolorosa condición. En el 2023, enfrentó fascitis plantar en el talón izquierdo. Sin embargo, a medida que se acerca la campaña, no siente ninguna molestia en ninguno de los pies y está tomando medidas extensas para prevenir cualquier recurrencia.
Esto incluye asegurarse de que su calzado ofrezca el soporte adecuado, ser selectivo con las superficies en las que corre y trabajar en su fuerza y flexibilidad.
“Ahora es más como mantenimiento”, explicó Correa. “Como hice cuando me lastimé la espalda en el 2018. Te lesionas una parte del cuerpo, luego te enfocas en fortalecer esa área y te mantienes trabajando en eso todos los días. Entonces, ahora el pie se ha convertido en parte de mi rutina.”
Eso significa que el enfoque puede estar plenamente en el béisbol. Correa ha estado trabajando en su casa en el área de Houston y preparándose para dirigirse a Fort Myers, Florida, una vez abra el campamento primaveral del club. La esperanza es que todo esto sume a un Correa tan efectivo como lo fue en el 2024 y tan resistente como ha sido en años anteriores.
“Estoy completamente listo”, aseguró. “Estoy bateando. Estoy agarrando rodados. Estoy corriendo y haciendo sprints, cambios de dirección. Puedo hacer todo lo que normalmente hago en el invierno para prepararme para una temporada completa.”
Fuente: MLB