Toews, mítico jugador de los Blackhawks, lleva dos meses sin jugar y tratará de volver antes de que acabe la temporada regular para poder despedirse de la que ha sido su casa durante tres lustros.
Poco queda de la gloriosa etapa en que los Blackhawks conquistaron tres Copas Stanley (2010, 2013, 2015). La marcha de Patrick Kane a los New York Rangers fue el golpe más duro que han tenido que afrontar sus aficionados, que ahora esperan poder despedir a Jonathan Toews y empezar a mirar hacia un futuro que, a corto plazo, se presenta complicado.
Toews, que ha jugado quince temporadas en Chicago, lleva fuera de las pistas desde el 28 de enero debido a los efectos del COVID. El capitán de la franquicia ya se perdió entera la temporada 20/21 por un síndrome crónico de respuesta inmune.
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Lo cierto es que al center se le acaba este verano el contrato de ocho años que hizo funcionar en julio de 2014. A sus 34 años y con los recientes problemas de salud que acarrea, podemos estar ante el fin de su carrera con los Blackhawks, algo que tambien pasa por la cabeza del jugador.
“Más allá de lo que pase con mi futuro, tengo en la mente que pueden ser mis últimas semanas con esta camiseta, así que es muy importante para mí salir ahí y disfrutar de este deporte y apreciar todo de lo que pudo ser parte aquí en Chicago, además de mostrar mi cariño por todos los aficionados de Chicago también”, confesó.
En lo que va de curso, Toews ha disputado 46 partidos en los que ha dividido sus 28 puntos a partes iguales: 14 goles y 14 asistencias.
El estado de salud del veterano jugador canadiense es una incógnita, pero lo que sí sabemos es que tiene dos semanas para cumplir su sueño de decir adiós a Chicago con la camiseta de los Blackhawks enfundada.
